Los abismales despojos de una tierra heroica que fue dando pedazo a pedazo su vida entera, de ella extrajeron incalculables riquezas para que otros pueblos y otros hombres fueran felices. ¿Quién lo reconoce?. Lo cierto es que en ningún otro meridiano o paralelo de la tierra se ha dado esta muestra de sacrificio. En el año de 1944, nuestro poeta cerreño Lorenzo Landauro, anegado de dolor, escribe este Réquiem por su tierra.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario